SE CONSCIENTE DE TU VALÍA

¿Eres consciente del enorme valor de tu persona? Eres alguien único e irrepetible, con unas características exclusivas y excluyentes.

No hay nadie como tu, con tus dones y talentos, con tu específica forma de Ser y de funcionar, con tu mismo aspecto físico, con tu forma de expresarte y relacionarte, con tus atributos , con tus virtudes y tus defectos, con tus heridas por sanar y con tus heridas ya sanadas, con tus partes luminosas y con tus partes que no lo son tanto; por eso eres valioso, por el simple hecho de Ser y haber encarnado en este planeta con un propósito y una misión que tu alma diseñó antes de encarnar, para tu evolución y para tu experimentación, todo ello en favor del Espíritu-Fuente, al que estamos conectados y del que somos una pequeña porción, una Chispa Divina con poder de creación.

Creamos mediante nuestro libre albedrío, utilizando nuestra mente y también nuestro sentir, nuestra parte emocional. Pero si tú no te reconoces en tu valor difícilmente podrán hacerlo los demás, todos aquellos con los que interactúes, pues ellos siempre te reflejarán tu propio sentir y tu propia visión de ti.

De ahí la importancia de empezar por darnos a nosotros mismos el valor que merecemos, somos valiosos por el mero hecho de existir y no necesitamos hacer nada extra para aumentar nuestro valor, somos valiosos por naturaleza.

Nuestras experiencias son preciosas para la Fuente creadora, sean buenas o malas, todo son experiencias -de ello os hablaré en otra ocasión- que una vez integradas en nosotros, pasarán a la correspondencia, para incrementar Todo lo que Es que está en continua expansión.

Centrémonos en reconocer nuestra valía, en cultivar nuestro amor propio y en darnos ese reconocimiento interno que nos merecemos. No hay que hacer nada para ganarlo, no hay que ser especial, en realidad ya lo somos, cada uno en nuestra propia individualidad, solo tenemos que aceptar nuestro propio valor, sin fisuras ni condicionamientos.

El hecho de reconocer nuestra valía será integrado por nuestra alma, con lo cual contribuiremos a que el Espíritu-Fuente adquiera más experiencias de valor y con ello posibilitaremos que las próximas generaciones encarnen con una nota de valor más alta, en otro estadio superior de evolución, tal vez con otro tipo de asignaciones espirituales, pero ya no con la asignación de valor propio, pues ésta estará integrada y aprendida.

Y tu. ¿has tomado consciencia del enorme valor de tu persona? ¿Cultivas tu amor propio?

¿Te valoras incondicionalmente?

Me encantará leerte en comentarios.