Desde que descubrí que la mejor manera de crear magia en mi vida es simplemente creando energía y dando atención y accionando en relación a aquello que quiero conseguir, mis objetivos se van materializando paso a paso, y eso es mágico.
Mi libro se hizo realidad porque día a día me puse a escribir. Al principio tal vez cuesta iniciar la actividad , dedicarle tu energía, pero está comprobado que todo camino se inicia con el primer paso, y tras él el segundo, y así sucesivamente.
Y una vez accionamos, si somos capaces de mantenernos y ser constantes en dicha acción, de no rendirnos ante el desánimo, la pereza, o cualquier otro obstáculo que nos aparezca - que suelen aparecer, lo digo por propia experiencia- observaremos que cada vez nos resulta más fácil realizarla y mantener nuestro compromiso, pues la energía ya está creada y como más constantes somos, más energía creamos, con lo cual nos resulta mucho más fácil de lo que nos creíamos alcanzar la meta que nos habíamos propuesto y que al inicio se veía tan lejana. Yo así lo he experimentado y para mí es pura magia.
Cuando nos proponemos realizar cualquier acción a la que ofrecemos resistencia o que sencillamente nos cuesta, aunque en el fondo sabemos que queremos hacerla porque es lo mejor para nosotros o porque simplemente nos hace ilusión y nos apetece, hemos de saber que lo principal es crear la energía necesaria para iniciar esa acción y luego perseverar y no abandonar a la primera de cambio.
Está estudiado que tras unos días seguidos realizando una actividad, se ha dicho que son 21 días, se crea el hábito y es más fácil mantenerse firme e incorporarlo a tu rutina. Yo creo que todo es mental, que si tu crees que en dos días lo has conseguido, así será y si crees que es un imposible, pues también lo será, porque tenemos una mente poderosa, que crea según nuestras propias creencias, por ello es tan importante tenerla dominada y acostumbrada a pensar a nuestro favor y no en contra. Pero independientemente de las creencias de cada uno, esos 21 días nos van a venir muy bien para practicar y para darnos cuenta de si realmente nos funciona, con ello no perdemos nada, al contrario, podemos ganar un aprendizaje muy valioso y que nos puede servir en todas las facetas de nuestra vida.
Lo que sí que es cierto es que cuanto más practiquemos una determinada actividad más fácil nos resultará hacerla, pues ganamos experiencia y esa acción se convierte en algo conocido para nosotros y es mucho más fácil generar la energía necesaria que nos permita mantenernos en esa actividad.
Así que te animo a experimentar la magia de dar el primer paso con la consciencia de que estás creando energía, la primera que se necesita, y a partir de ahí te será más fácil dar energía a la actividad deseada pues energía crea sobre energía y lo que al inicio te ofrecía resistencia, al crearse nueva energía llegará el momento en que la energía creada habrá alcanzado el grado necesario para que el cuerpo te pida más de aquello que te parecía tan laborioso , pues ya lo habrá incorporado a su rutina de vida.
¿Te atreves a experimentar la magia en tu vida creando la energía necesaria para dar los primeros pasos y constatar que ésta se multiplica? No me creas, experiméntalo y me lo cuentas. Me encantará leerte en comentarios.
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