Los sueños se alcanzan con perseverancia, manteniéndonos firmes en la actividad y no desistiendo de buenas a primeras. Todo sueño requiere un tiempo de gestación y a veces nos inunda el desánimo cuando vemos que no se cumple con la celeridad que nos hubiera gustado, pero ello no quiere decir que no vaya a materializarse, simplemente que aun no es el momento perfecto para ello, simplemente debemos mantenernos firmes en nuestro deseo y continuar accionando hacia él , pues esa es la única manera en que podremos conseguirlo, pues si nos paramos o desandamos el camino difícilmente llegaremos a nuestra meta, tal vez sí, pero dando un rodeo innecesario que nos va a retardar aun más de la ansiada meta
Los tiempos del universo son perfectos y nosotros no podemos controlarlos a nuestro antojo, simplemente hemos de mantenernos en disposición y accionar en la dirección correcta cuando las circunstancias así lo requieran. A veces nuestros sueños no se cumplen porque no es el momento, porque no le hemos dado la energía adecuada o por otros factores ajenos a nosotros y que no podemos prever, pero lo que sí está en nuestra mano es mantenernos firmes en nuestro propósito y continuar dando los pasos adecuados en la dirección escogida que nos encaminará a nuestro ansiado trofeo.
Constatar que estamos haciendo lo que está en nuestras manos y confiar plenamente en que el Universo, la Energía, La Fuente , Dios - como quieras llamar a ese poder creador que nos rige y que está en todos y cada uno de nosotros, como una chispa divina insertada en nuestro interior - hará su parte en orden a cumplir nuestros deseos y los manifestará en nuestra realidad como algo físico y tangible , o algo sutil y espiritual si es el caso.
Más si abandonamos o nos desviamos de nuestro sueño, por creerlo imposible o inalcanzable a nuestras posibilidades, entonces no se realizará. A veces solo hay que tener paciencia y esperar a que se produzca el circuito necesario para que se coordinen todos los factores que lo harán posible.
Así que te invito a no rendirte y a que si realmente tienes un sueño que quieres alcanzar perseveres y seas constante en tus deseos, y tengas la paciencia necesaria para dar tiempo a la creación a que termine su obra. Yo me lo imagino como una descarga en el ordenador, en que la información va llegando y no finaliza hasta que ha completado toda la acción . Así pasa con nuestros sueños y nuestros deseos lanzados al universo, pero si cancelamos la descarga antes de terminar, ésta no se produce y en todo caso hay que volver a comenzar y todo el esfuerzo realizado no habrá servido de nada.
Somos impacientes por naturaleza, lo queremos todo para ayer y pretendemos tener controlado todo el proceso. Cuando nos damos cuenta de que ello no es posible y aprendemos a fluir con lo que se presenta, accionando cuando las circunstancias lo requieran, lo difícil se convierte en fácil y el universo conspira a nuestro favor para la realización de nuestros sueños, eso sí, a su manera, que es la más perfecta que podamos imaginar.
Y tu, ¿Perseveras en tus sueños? ¿Dejas en manos del universo su materialización? ¿Accionas siempre que las circunstancias lo requieren? ¿Confías en que éstos se realizarán en el momento perfecto para tí y para todos los involucrados?
Me encantará leerte en comentarios.
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